martes, 27 de septiembre de 2016

Sevilla

                             


¿Qué ver en Sevilla?
Comencé por el monumento más famoso de Sevilla, la espectacular Giralda. Y junto a ella encontramos la hermosa Catedral de Sevilla, situada a los pies de la torre más famosa de la ciudad. 
Dentro de la Catedral pudimos visitar la capilla de alabastro y la tumba de Cristobal Colón.
Tras visitar el interior de la Catedral nos dirigimos hacia el interior de la Giralda, con entrada desde el propio interior y subimos su rampa hasta la parte superior desde con unas vistas geniales de Sevilla, sus alrededores y también del famoso Patio de los Naranjos de la Catedral a donde nos dirigimos tras descender nuevamente.
El siguiente punto de nuestra visita fueron los Reales Alcázares, un refugio de paz y naturaleza.
Tras un primer día muy completo visitando la zona donde se encuentran los principales monumentos de Sevilla y los tres que forman el mejor conjunto arquitectónico de la ciudad. Nos alejamos un poco del centro para ver otros lugares de gran interés.
En primer lugar nos dirigiremos hasta la Plaza de América, en el interior del Parque de María Luisa, con los tres edificios que fueron construidos para la Exposición Iberoamericana de 1929 y que también dejó otras joyas en la ciudad.
Pero lo mejor que nos dejó aquella exposición fue la Plaza de España, un homenaje a todas las provincias de España con una arquitectura envidiable que simula un abrazo al Río Guadalquivir y donde es imposible que su belleza no inunde nuestros ojos.
Junto a la Plaza de España se encontramos el parque más famoso de Sevilla, el Parque de María Luisa, un parque precioso, un museo al aire libre, donde disfrutar de la tranquilidad la naturaleza y relajarse.
Tras salir del parque y admirar el Palacio de San Telmo fuimos hasta la Fábrica de Tabacos, un gran símbolo de la revolución industrial que actualmente alberga la sede de la Universidad Hispalense.
 Torre del Oro. A orillas del Río Guadalquivir y en la zona portuaria encontramos esta bonita torre.
En su interior se encuentra también el Museo Naval, con maquetas, cartas de navegación y otros detalles que te llevan por la historia de la navegación de Sevilla.
El siguiente punto de interés lo encontramos un poco alejado de allí; se trata del Museo de Bellas Artes, fuimos andando a orillas del río. A medio camino la fachada de la Plaza de Toros de la Maestranza,
Tras visitar el Museo de Bellas Artes, cruzamos el río y nos adentramos en uno de los barrios más especiales de Sevilla y con más encanto, el Barrio de Triana, la cuna del flamenco.
En sus callejuelas podrás sentirte un sevillano más y disfrutar del ambiente de la Sevilla más auténtica. 

  

sábado, 24 de septiembre de 2016

Córdoba monumental






La Mezquita



Si pudiéramos elegir un solo monumento de Córdoba sería éste.
Pasear por el Patio de los Naranjos es uno de los mayores placeres que puede disfrutarse en esta ciudad.

La gran Mezquita de Córdoba es una de las construcciones más impactantes de España, con su entramado de más de 1.000 columnas. Pero no sólo es un lugar importante por su belleza, sino también por su historia. Se comenzó a construir en el año 785 después de la invasión de los musulmanes y llegó a ser la segunda mezquita más grande del mundo por detrás de la Meca. Tras la Reconquista en el siglo XIII fue convertida en Catedral. Está declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad dentro del centro histórico de Córdoba. 

Muy cerca de la mezquita está la Calleja de las Flores, pequeña y estrecha calle adornada con coloridas macetas y un par de arcos de piedra, la preciosa imagen que se obtiene de la torre de la catedral sobresaliendo entre las paredes desde la plaza al final de la calle es una gran postal.
Alcazar de los Reyes Cristianos.  Con sus murallas y torres son ideales para contemplar la ciudad de Córdoba desde las alturas, pasear por los jardines de la parte posterior es una maravilla... Como curiosidad, en la Torre del Homenaje fue donde Cristóbal Colón se reunió con los Reyes Católicos para solicitarles financiación en su aventura por los mares que todos conocemos.
Cristo de los Faroles. Situado en la Plaza de los Capuchinos, esta escultura de Cristo está rodeada por una verja y por ocho faroles que lo iluminan por la noche. El Cristo de los Faroles es muy famoso por ser nombrado en muchas canciones y coplas.
El imponente Puente romano de Córdoba, también conocido como puente viejo, fue el primero que atravesó el río Guadalquivir en esta ciudad construido en el siglo I d.C. En el extremo cercano a la Catedral se encuentra la Puerta del Puente, antigua puerta que daba acceso a la ciudad; y en el otro extremo se encuentra la Torre de la Calahorra, una fortaleza desde la que se vigilaba el puente. Recomendables las vistas de la ciudad desde la otra orilla al atardecer y por la noche. 
La Judería:  Alrededor de la Mezquita se extiende el barrio de la Judería, que debido a su singulridad, fué declarado integramente Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Por eso debemos perdernos y admirar sus callejuelas.

Gran parte del encanto de la ciudad está en sus placitas y callejuelas. La Plaza del Potro (en una de cuyas múltiples posadas se hospedó Cervantes), alberga entre sus muros el Museo de las Bellas Artes y el Museo de Julio Romero de Torres, y puede ser tomada como un simple ejemplo de los múltiples rincones con encanto de Córdoba. 
La Corredera. La menos andaluza de las plazas cordobesas es quizas la mas representativa y famosa de la ciudad. En ella se celebraron corridas de toros, ejecuciones públicas, actos oficiales y religiosos...repleta de pequeños negocios y bares en los que sentarse a reponer fuerzas.
Comer. En una visita a Córdoba no puede faltar degustar algunos de los platos cordobeses más famosos. En casi cualquier bar o restaurante donde comer en Córdoba nos será muy fácil encontrar las famosas berenjenas con miel. Son muy populares las aceitunas aliñadas, el rabo de toro estofado y los flamenquines (rebozados con relleno de queso, jamón y lomo). Y como no, el popularísimo salmorejo, plato tradicional de Córdoba que se prepara con miga de pan, tomate, sal, aceite de oliva, ajo y jamón serrano y huevo por encima. 
Son las berenjenas Califales. Rebozadas con reducción de Pedro Ximénez. Se ofrecen en las Bodegas Mézquita. Están buenísimas!!!!!!
Aqui se puede ver el  video